El sistema defensivo del Elche fue perfecto para frenar al Real Madrid. Presión, intensidad y marcajes férreos. Pero a los ilicitanos se les escapó un detalle fundamental cuando se trata de puntuar frente al equipo merengue: marcar también al árbitro. Y, si el Madrid saca un córner, no se puede dejar al árbitro completamente solo dentro del área. Remata.